Pon un monje en tu casa con St Bernardus
Si oyes decir el nombre de “St Bernardus” seguramente sepas que nos estamos refiriendo a una de las cerveceras más prestigiosas de Bélgica, cuyas excelentes cervezas nos llevan acompañando largo tiempo en nuestra trayectoria comercial.
Sobre St Bernardus:
La historia de St Bernardus como cervecera, arranca en 1945, cuando el abad de la abadía trapense de St. Sixtus, en Westvleteren, cedió a Evarist Deconinck (quesero de la cercana población de Watou), una licencia para la elaboración comercial de las cervezas de su monasterio. Deconinck construyó un edificio contiguo a la quesería para la elaboración de la cervezas.
Con las recetas, bajo el control y supervisión de los monjes trapenses del monasterio, y la ayuda de la figura del maestro cervecero de origen polaco Mathieu Szafranski, nació la cervecera St. Bernardus que empezó a elaborar las cervezas con el nombre St. Sixtus Westvleteren en las etiquetas. En 1959 Deconinck vendió la quesería para dirigir todos sus esfuerzos a la elaboración de cerveza, y poco después a comienzos de los años 60 renovó su licencia con el monasterio durante 30 años más.
Finalmente, ante las exigencias de la AIT (Asociación Internacional Trapense), que para poder preservar el origen trapense de sus cervezas, obligó a su elaboración dentro de los muros de los monasterios, el vínculo se rompió definitivamente en 1992. A partir de entonces tuvieron que renunciar a la producción bajo el nombre que habían utilizado. Sin embargo, prosiguieron su andadura manteniendo las recetas y la calidad de estas, con la marca St.Bernardus (que tomaba el nombre del antiguo refugio en Watou que usaron los monjes trapenses de Mont des Cats a principios del siglo XX).
Siguiendo fieles a la tradición monástica, las cervezas de estas recetas llevan los nombres del escalafón de los monasterios como son Pater (6), Prior (8) y Abt.(12). La Extra 4 sin embargo, no lo hace. Se trata de la receta de la patersbier, es decir la cerveza que bebían tradicionalmente los monjes en las comidas. Todas ellas tienen fama internacional incluidas las de recetas propias como son la St. Bernardus, siendo apreciadas tanto por expertos, profesionales y aficionados cerveceros.
“Pon un monje en tu casa”:
Si eres un aficionado a las cervezas belgas y tienes un local, es una gran oportunidad para tu negocio que pensamos no debes dejar escapar. Queremos contar contigo! ¿Te apuntas?



